martes, enero 09, 2007
Vanidad
En la piel tengo anclada la mala costumbre de sentir que todo es mío.
Que no puedo perderte,
que la fe en mis abrazos basta para que no te escapes.
Que cada mirada tuya recala en mí,
que cada sonrisa tuya nace de tu vientre agradecida de mis besos.
Que el egoísmo era la mejor manera de hacerte sentir feliz.
¡Qué vanidad!
Ahora mis lágrimas me explican lo torpe que fui.
¿Cómo dormir seguro de tus manos si me deshice de ellas dedo a dedo?
¡Vanidad! ¡Vanidad!
El ego subido al cielo y golpeado en la cabeza hasta partirlo en mil.
Ahora heme aquí,
doblegado por tu ausencia.
Imprudente de mí.
La nocturnidad de tu olvido me dirá cuánto valgo realmente.
¡Cuánta desdicha nace de mí!
El ronquido sordo de tus tactos ya no arrullará mis sueños.
¡Vanidad!, ¡Vanidad! Culpable vanidad...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Foto extraída de www.fotolog.com/sexymon
ResponderBorrarde Simon Pais Thomas
Foto en revisión
y hasta ese llanto es un acto de ego, y tan poderoso que todo lo demás parece dar lo mismo.
ResponderBorrarOh si, el ego… el poder, la manipulación amorosa…
El amor egótico que no se sale del pellejo del corazón. Como un lunar esta ahí, siempre ahí
Yo no deseo mi ego, menos mi vanidad
Busco un amor desde fuera del ego
Lejos de la vanidad
Mucho más lejos de la manipulación afectiva.
Sueño o no sueño
Voy en ese camino
Y a veces creo y siento
Que mi búsqueda la acompaña mi vanidad.
Tiago